Mañana se tratará la Ley Bases acotada
Las negociaciones entre el Ejecutivo y las provincias siempre han sido un terreno complicado, especialmente cuando se trata de temas urgentes y necesidades regionales. En este contexto, las transacciones se tornaron difíciles, marcadas por la fragmentación en los sectores dialoguistas, cada uno con sus propias demandas, lo que complicó aún más el proceso.
Tras dos meses de intensas discusiones, finalmente se alcanzó un acuerdo. Sin embargo, el Gobierno debe ser cauto antes de cantar victoria, ya que los opositores prometen llevar más reclamos al debate en el recinto este lunes, cuando inicie la sesión maratónica.
Los votos se contarán uno a uno, en los momentos de mayor tensión que ofrecerá el espectáculo legislativo. En juego está la Ley de Bases, que, de aprobarse, conferirá al Ejecutivo facultades para ordenar e incluso suprimir un amplio listado de organismos públicos, someter a privatización a varias empresas estatales y asegurar el control de fondos fiduciarios millonarios. Además, se habilitará un régimen para grandes inversiones, aunque con un umbral alto de USD 200 millones, lo que limitará su acceso.
Como complemento, se incluyó una modesta reforma laboral que aborda demandas de las PyMEs para una mayor flexibilidad en la contratación de empleo en blanco, aunque excluyendo los aspectos más controvertidos para la CGT.
Sin embargo, la discusión no termina aquí. La UCR, con apoyo transversal de diputados, pedirá la eliminación de las “cuotas sindicales”, generando tensiones adicionales para el oficialismo.
La Coalición Federal, liderada por Miguel Pichetto, buscará ampliar el acceso al régimen de inversiones, insistiendo en la participación de las PyMEs, aunque con requisitos menos rigurosos. Además, criticarán la renuencia del Gobierno a revisar los gastos tributarios que benefician a ciertos grupos empresariales.
En cuanto al paquete fiscal, se esperan numerosas propuestas de modificación, como excluir las guardias médicas y las horas extra de las fuerzas de seguridad de las retenciones de Ganancias, así como solicitar un trato especial para los trabajadores de la Patagonia debido a los altos costos de vida.
El proyecto de Bienes Personales también generará debate, ya que, además de aumentar el mínimo no imponible y reducir las alícuotas, introduce un régimen de tributación unificada y adelantada para los próximos cinco años.
En medio de este debate maratónico, todo puede suceder. Aunque tanto oficialistas como opositores dialoguistas han hecho un conteo detallado de votos sobre los puntos más conflictivos, admiten que aún pueden surgir sorpresas.
En términos de concesiones, el oficialismo acordó una reforma laboral acotada y limitada, así como una reducción significativa en el número de empresas a privatizar. Se eliminaron amplias facultades del Ejecutivo en materia de desregulación económica y se incorporó una prestación previsional proporcional. Además, se acotó el margen de acción sobre los fondos fiduciarios y se amplió el listado de organismos públicos a disolver, incluyendo varias entidades inicialmente excluidas.
