Exigen urgente implementación de campaña de vacunación contra el dengue en Villa Constitución
Los concejales Alejandrina Borgatta y Nicolás Rubicini han elevado un proyecto que demanda al gobernador Maximiliano Pullaro la consideración inmediata de una campaña provincial de vacunación contra el dengue. Esta solicitud surge ante la negativa del gobierno nacional de tomar medidas similares, a pesar de la situación crítica que atraviesa el país.
Con más de 130 muertes y más de 200 mil casos positivos a principios de abril, la epidemia de dengue ha causado estragos en Argentina. En la provincia de Santa Fe, los números son alarmantes, con más de 25 mil casos confirmados y 12 fallecidos.
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La postura del gobierno nacional, argumentando que la inmunidad se adquiere con el tiempo, ha generado preocupación entre los ediles. El biólogo molecular Ernesto Resnik ha desacreditado esta afirmación, señalando que la inmunidad se desarrolla rápidamente y persiste a largo plazo. Esto subraya la importancia de actuar con responsabilidad al comunicar información sensible sobre salud pública.
Según Borgatta y Rubicini, la negativa del gobierno nacional de incluir la vacuna contra el dengue en el calendario obligatorio afecta la equidad en el acceso a la salud, privando a todas las provincias de la oportunidad de proteger a su población de manera adecuada.
Ante esta situación, varias provincias han optado por adquirir dosis de la vacuna TAK-003 (Qdenga) con recursos propios. Sin embargo, el elevado costo de esta vacuna, que supera los $70,000 por dosis, la hace inaccesible para la mayoría de las familias argentinas. Por ello, es crucial que el gobierno nacional garantice su inclusión en el calendario obligatorio para que la vacunación sea gratuita para todos.
Los concejales instan al gobernador Pullaro a seguir el ejemplo de otras provincias y lanzar una campaña provincial de vacunación contra el dengue. También exigen informes sobre las acciones realizadas por el gobierno provincial y nacional en los últimos tres meses para prevenir y controlar la propagación del dengue, especialmente considerando la falta de sensibilidad hacia las clases trabajadoras y menos pudientes.
