Desequilibrio de las prepagas: incremento de costos para afiliados y reducción de ingresos para médicos
En un intento por adecuar las cuotas frente a la inflación, la actual administración ha decidido retrotraer y ajustarlas, previendo una reducción estimada del 33% en el valor mensual. Sin embargo, esta medida ha generado rechazo por parte de los prestadores, quienes argumentan que el índice general de precios no refleja adecuadamente la realidad del mercado de medicamentos e insumos, desvinculados del sistema de importación a crédito.
Durante la gestión anterior, la brecha entre la inflación y el aumento de los costos en el sector de la salud fue significativa. Mientras la inflación acumulada en cuatro años alcanzó el 1.559%, los costos de la salud se incrementaron en un 1.676%, las empresas de medicina prepaga en un 1.636%, y los aranceles médicos en un 991%. Esta disparidad evidencia un desfinanciamiento que se ha acentuado con el tiempo, dejando a los prestadores en una situación económica precaria.
El marco regulatorio también ha experimentado cambios significativos, como el DNU-70-2023, que eliminó las restricciones de precios a la industria prepaga. Sin embargo, las asimetrías persisten, exacerbadas por la devaluación, la escasez de insumos y el aumento exponencial de los medicamentos, prótesis y descartables.
En este contexto, los médicos se han visto relegados en la distribución de recursos, reflejado en la disminución de sus ingresos, como evidencia el caso de la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la Provincia de Buenos Aires (Cicop), cuyos salarios apenas alcanzan el 55,8% de su valor en noviembre de 2020.
Si bien se esperaba que el ajuste de cuotas mejorara el acceso a la salud de calidad, los resultados muestran que los pacientes pagan más mientras los médicos reciben menos, sin que los servicios mejoren en correspondencia. La discrepancia entre los precios de la medicina prepaga y la inflación oficial refleja una situación preocupante que requiere una revisión exhaustiva del sistema para garantizar la equidad y la calidad en la atención médica.
